«Lo dejé todo para cumplir mi sueño»

Hoy nos citamos con Gaizka Garai Bilbao, fisioterapeuta del Club Esportiu Europa de la Tercera División Española. No había mejor lugar para este encuentro que su templo, su lugar de trabajo y de desarrollo profesional, el campo municipal Nou Sardenya. En él pasa gran parte de sus horas de trabajo cuidando y rehabilitando a sus jugadores. Desde las gradas, contempla las decenas de niños que en ese momento entrenan, a la vez que nos relata su visión de la temporada actual del equipo.

«Hemos tenido un año muy irregular, primero empezamos bien, luego tuvimos un bajón importante, cosa que nos perjudicó mucho. Sin embargo llevamos otras 17 jornadas sin haber perdido y nos sitúa en los puestos de playoff» añade con orgullo. No es nada fácil aterrizar en un club nuevo, pero si además llegas a uno en el cual las exigencias son muy altas, la cosa se complica. Mientras abre una botella de agua, Gaizka nos explica la importancia que tiene el entrenamiento extra llevado a cabo en el gimnasio por parte de los jugadores. «Hoy en día, a parte del trabajo que podamos ver en el campo, se hace un trabajo individualizado a nivel de gimnasio, ya que cada jugador tiene unos déficits que hay que tratar individualmente» recalca que «hay que saber diferenciar el trabajo físico general para el equipo que el realizado en base a las carencias de cada jugador».

Este vasco, nacido en Plencia (Bilbao) en 1978, relata con orgullo y pasión su larga trayectoria dentro del mundo de la fisioterapia deportiva. «Dejar mi pueblo y mi familia fue la decisión más importante de mi vida». Y añade que fue una decisión muy complicada ya que «tuve que elegir entre seguir jugando a fútbol o bien venirme a Barcelona solo, para iniciar mis estudios de fisioterapia en la Universidad Internacional de Cataluña». Este cambio fue probablemente el más determinante de la vida de Gaizka. Con la vista fijada en el horizonte y brillo en su mirada recuerda como dejó toda una vida atrás a la temprana edad de 18 años.

Sin dejar de recordar sus inicios, Gaizka cuenta como le vino esa inquietud por la fisioterapia. «Era algo que ya de pequeño me llamaba la atención, siempre veía que cuando un jugador se hacía daño, el fisio salía y ese trabajo era el que realmente me gustaba«

«Cuando me llegó la oportunidad de estudiar fisioterapia, aquí en Barcelona, no la pude rechazar.»

Mientras se coloca la sudadera, el fisioterapeuta del CE Europa deja de lado su pasado más lejano para centrarse en sus años profesionales más recientes. «Al terminar la carrera tuve mucha suerte ya que el mejor equipo de España de Hockey hierba, el Atlètic de Terrassa, me ofreció ir con el equipo juvenil a realizar un torneo» recalca que «a partir de ahí me contrataron y pase 8 años maravillosos en el primer equipo. Fue una experiencia personal y  profesional espectacular«. De nuevo otro trago de agua. «A partir de ahí, me llego la oferta del CE Sabadell para el puesto de readaptador del equipo». En observar nuestro desconcierto acerca de la diferencia entre fisioterapeuta y readaptador añade que «es el encargado de recuperar a los jugadores a nivel de campo, el que realiza los ejercicios específicos, sobre todo a nivel de prevención de lesiones». Con una gran sonrisa esbozada relata como «el hecho de poder trabajar en Segunda División Española con jugadores del calibre de Raúl Tamudo era una auténtica pasada».

Gaizka
Gaizka en el momento de la entrevista. / JÚLIA CLAVERO

Con el entrenamiento de los más pequeños de fondo, Gaizka nos muestra su parte más íntima y personal. «Uno de mis defectos es que soy un poco gruñón, en momentos que algo me molesta protesto, como bien es lógico». Para equilibrar la balanza, recalca que «en los momentos que tengo que ensalzar una virtud lo hago, además soy una persona muy comprensiva, dispuesto a escuchar y a intentar resolver los problemas de quienes me rodean».

Como no podía ser de otra forma, este fisioterapeuta sin pelos en la lengua se lanza a la piscina con un pronóstico sobre su actual equipo. «Subiremos a Segunda División B», grita entre risas. Con un portento más serio concluye «cabe añadir que será muy complicado, pero lo vamos a intentar. Son eliminatorias muy disputadas, de tú a tú, en las cuales juegas con equipos similares a tu nivel».

Cuando ya se cree que el encuentro ha acabado le presentamos un pequeño cuestionario de 5 preguntas, el cual deberá acertar si no quiere tener que subir y bajar las escaleras de la grada del Nou Sardenya.

 

-Mònica Aguilar Tuset-


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